Estas bolas o esferas inflables, llamadas 'Bubble Balls', se han vuelto tremendamente populares de un tiempo para acá. Llegaron para amenizar el verano en las ferias, parques de diversiones, lagos y centros comerciales, y rápidamente se convirtieron en una de las atracciones favoritas de los niños más pequeños.
Pero antes de que dejes a tu niño probarlas, debes saber que esta actividad –conocida como 'caminar en el agua'- representa un riesgo potencial de asfixia y golpes serios.
La Comisión para la Seguridad de los Productos de Consumo de los Estados Unidos (CPSC) tiene conocimiento de dos incidentes que involucran 'Bubble Balls'. En uno, se encontró a un niño sin inconsciente luego de haber estado dentro de la bola por un período corto. El pequeño requirió atención médica. En otro, una persona dentro de una bola sufrió una fractura cuando ésta se salió de la zona con agua que se había montado sobre el suelo de concreto.
Esto es lo que debes saber:
- Las esferas inflables son herméticas. Debido a esto, el dióxido de carbono puede acumularse dentro de la bola. El dióxido de carbono y los bajos niveles de oxígeno hacen que sea difícil respirar. Este peligroso escenario puede suscitarse en pocos minutos.
- La mayoría de las pelotas no tienen salida de emergencia. Sólo pueden abrirse por una persona fuera de ella.
- Las esferas no tienen acojinamiento. Esto significa que pueden ocurrir lesiones si las bolas –y la gente dentro de ella- chocan unas contra otras, contra objetos duros como un muelle o un bache, o simplemente caen fuera de la alberca sobre concreto u otra superficie dura.
Antes de permitir que tus hijos tomen el riesgo, debes saber que la CPSC no reconoce una forma segura de usar este producto.
Fuente: CPSC