Desarrollar la fuerza de voluntad en los niños no es tarea fácil, para llevarse a cabo se necesita ejercitar de manera psicológica al pequeño desde las primeras etapas de su vida para obtener los frutos cuando ya sean adolescentes. El papel de los padres es fundamental para este proceso.
Cuando los niños aprenden a controlar impulsos desde pequeños no solo los ayuda a controlarse sino también a conseguir lo que desean por medio de sus esfuerzos, aprenderán que solo con esfuerzos alcanzan lo que se proponen, una manera de ejercitarlos es premiarlo con cualquier actividad que haya hecho de manera impecable.
Hoy en día, en la sociedad en que vivimos es más difícil conseguir que nuestros niños se controlen debido a las tentaciones que ellos atraviesan día a día por medio de la televisión u otros factores que también influyen con lo que es la publicidad. Para que los jóvenes conviertan el hábito de la voluntad como una virtud es necesario que sepan porque lo hacen y para qué.
Las virtudes y los valores son una base fundamental para ayudar a los niños a pasar por este proceso promoviendo siempre el esfuerzo.
Algunos consejos que pueden ser aplicados en el día a día, según el libro Actualidad Docente
1- Que los niños acaben las tareas o deberes escolares antes de ir a jugar
2- Motivar positivamente sus buenos comportamientos e intentar hablar con ellos (positivamente) de las malas actuaciones
3- Reconocer su interés y sus esfuerzos (aguantar la sed en un viaje, acabar los deberes, dejar la ropa preparada por la noche)
4- Dar ejemplos (de no quejarse, ser decidido, de disciplina, de comprometimiento)
5- No decir jamás frases negativas como "eres un desastre", "eres impaciente"
Fuente: Actualidad Docente
Analuisa Rojas- pasante