El 15 de enero se conmemora en Venezuela el Día del Maestro, una fecha en la cual se honran a miles de hombres y mujeres que desempeñan la significativa labor de convertir la enseñanza en su trabajo habitual, educar y formar a sus alumnos que  son el futuro de un país.


Ser docente de vocación es  un trabajo noble, enriquecedor y gratificante. Se resume en una labor firme y paciente en la al mismo tiempo maestro debe ser firme, sutil y perseverante. Pero por encima, no es sólo brindar conocimientos, es saber amar, apoyar y orientar a sus estudiantes.

Los docentes poseen la importante responsabilidad de educar para la vida, desempeñan la notable y valiosa labor de formar seres humanos solidarios, respetuosos, humildes, arraigados a sus valores, que sepan amar a su familia y que quieran y contribuyan con su país.

Los maestros han desempeñado un papel significativo en la historia de Venezuela, desde Andrés Bello y Simón Rodríguez en la lucha por la Independencia, hasta docentes que trabajaron a favor del crecimiento del sistema educativo venezolana, como Luis Beltrán Prieto Figueroa, considerado el "Maestro de Maestros".

El Día del Maestro fue decretado por el General Isaías Medina Angarita el 15 de enero de 1932, esto como reconocimiento a los educadores que lucharon en plena dictadura de Juan Vicente Gómez para defender los derechos laborales de los maestros y mejorar la educación en Venezuela.


Por: Vanessa Salas (Pasante Comunicación Social USM)