A menudo, los menores pasan muchas horas de su vida frente a la pantalla del  televisor o frente a un computador. Es conveniente controlar la cantidad de tiempo y establecer límites, asimismo, es recomendable discutir algunos programas con ellos y orientarlos.


Con respecto a Internet, hasta no hace mucho, los jóvenes solían acudir a bibliotecas para consultar libros o enciclopedias y buscar la información para hacer sus trabajos escolares.

Ahora no tienen más que encender la computadora y buscar la información navegando por la red. Sin embargo, esta arma de doble filo puede resultar peligrosa para los hijos de padres que están demasiado ocupados o en sus trabajos y que no están lo suficientemente presentes para percatarse de los peligros de este medio.

Hoy en día, los jóvenes que son expertos en informática intercambian direcciones de sitios de Internet de acceso no restringido. Muchos padres resuelven este problema afirmando que sus hijos no miran “esas cosas”.

No se confíe, por ello debe estar alerta y debe actuar preventivamente, sugerimos establecer normas sobre el uso de Internet en la familia, con un horario limitado, claves de acceso restringido, navegación controlada y, por último, siéntese a navegar con ellos.

El mejor mensaje de prevención que se puede transmitir a los hijos es estar cerca y siempre estar disponible y dispuesto cuando su hijo lo necesite, que el sienta que cuenta con toda su atención y guía.